Ejecución:
Ahora, levanta una de las manos hacia el techo, mientras la otra sujeta la rodilla más cercana para apoyarse en ella. El brazo que has levantado, llévalo hacia el lado contrario por encima de la cabeza, haciendo que se doble y estire ligeramente tu dorsal de la espalda.
Vuelve a la posición inicial, sentado, con las piernas medio cruzadas y la espalda recta.
Ahora, realiza el mismo ejercicio hacia el lado contrario.
Repeticiones: 3 o 5 a cada lado.